Intervención de la senadora Gina Cruz Blackledge para referirse al dictamen de las Comisiones Unidas de Puntos Constitucionales y de Estudios Legislativos, Segunda, el que contiene proyecto de decreto por el que se reforma el artículo 123, Apartado B), fracción XIII de la Constitución.
13 de febrero de 2024
Versión de la intervención de la senadora Gina Cruz Blackledge para referirse al dictamen de las Comisiones Unidas de Puntos Constitucionales y de Estudios Legislativos, Segunda, el que contiene proyecto de decreto por el que se reforma el artículo 123, Apartado B), fracción XIII de la Constitución
Saludo con mucho respeto a las federaciones de policías, ministerios públicos, peritos y custodios de todo el país que en este momento nos siguen por el Canal del Congreso.
Honorable Asamblea:
Hoy es un día histórico para reconocer los derechos de quienes proveen seguridad a las y los mexicanos.
La reforma que hoy discutimos es crucial para el futuro de la seguridad de todas y todos, nuestro sistema de seguridad pública se debe sostener sobre los pilares firmes de las policías municipales y estatales, así como de los ministerios públicos, peritos y custodios.
Todos ellos lucharon por décadas para hacer valer sus justos derechos y para ser escuchados por el Poder Legislativo, que hoy es una realidad, los hemos escuchado.
Hoy, quienes merecen nuestro mayor reconocimiento, porque velan por nuestra seguridad, al fin tendrán la reforma que tanto anhelaron.
Con la reforma, ministerios públicos, peritos, custodios y miembros de las instituciones policiales de la Federación, entidades federativas y municipios se beneficiarían en el caso de que fueran separados de su cargo de manera injustificada y exista resolución jurisdiccional definitiva al respecto.
Se propone, además que la autoridad responsable pague la indemnización y prestaciones correspondientes al afectado, así como su reincorporación al servicio que desempeñaban, esa reforma realiza un imperativo de justicia, largo tiempo esperado y es, además, un paso indispensable para la dignificación de la función policial y de quienes se dedican a tareas de seguridad.
Gracias al trabajo comprometido de los integrantes de la Comisión de Puntos Constitucionales y de los miembros de la Comisión de Estudios Legislativos, Segunda, quienes votaron de manera unánime a favor, fue posible concretar esta reforma histórica que tardó más de 15 años en darse.
Gracias a las y los Senadores que escucharon y fueron solidarios con los representantes de la Federación de policías y entendieron sus necesidades, esta iniciativa no es de una servidora, esta iniciativa es de, precisamente, la Federación de policías, ministerios públicos, peritos y custodios que trabajaron durante largos meses en poder redactarla.
La seguridad pública es hoy la más alta prioridad para México, el adecuado diseño de una estrategia que fortalezca a quienes se encargan de la noble función de seguridad es indispensable.
La reforma es un primer paso para mejorar las condiciones laborales, las prestaciones y beneficios para quienes cuidan de todas y todos nosotros.
Se debe realizar, se deben realizar esfuerzos adicionales, para quienes se encargan de la seguridad en todos los rincones del país tengan una perspectiva de carrera, vivan protegidos y cuidados con sus familias, gocen de los derechos más amplios posibles y de la mayor protección posible por parte del Estado.
Quienes nos cuidan a todas y todos deben ser cuidados, respetados y valorados. Su insustituible trabajo debe darse bajo condiciones de decoro, profesionalismo y dignidad.
Necesitamos una fuerza policial de vanguardia, la construcción de la paz que tanto anhelamos, que comienza precisamente en nuestros municipios.
El fortalecimiento de las policías municipales es una tarea indelegable. El mandato constitucional es claro.
La seguridad pública es una función concurrente que involucra y compromete a los tres órdenes de Gobierno.
La investigación, prevención y persecución de los delitos comienza en los municipios y no puede, ni debe ser delegada.
La Federación debe asumir el papel que le corresponde y atacar con valor y determinación a los grupos criminales que retan al Estado.
Los fondos para seguridad, ahora desaparecidos, representan incentivos indispensables para formar corporaciones policiacas profesionales con capacidades mínimas y con capacidades de logística y recursos materiales suficientes.
No es posible combatir grupos criminales complejo con policías mal equipadas y sin recursos.
La fuerza del Estado se debe utilizar para garantizar el pleno ejercicio de nuestros derechos humanos, consolidar el imperio de la ley y edificar el Estado de derecho en el que nadie, ni nada esté por encima de nuestro orden constitucional.
Senadoras y Senadores:
Esta reforma constitucional es de la mayor trascendencia, salda una deuda histórica con nuestros policías, ministerios públicos, peritos y custodios al ampliar sus derechos y darles certidumbre de cara al futuro.
Con su voto a favor, el Senado le está enviando un mensaje al pueblo de México. Aprobemos aquellas reformas generosas y necesarias para proteger a quienes cada día nos protegen.
Las personas que se dedican a las tareas relacionadas con la seguridad pública ejercen una muy noble profesión y que debe ser reconocida y valorada. Este es un primer paso de muchos otros que tendremos que dar para que México tenga cada día instituciones más fuertes, robustas, sólidas y confiables.
Muchas gracias a quienes nos brindan seguridad.
Mi reconocimiento a las y los policías de México, a los ministerios públicos, a los peritos y custodios por su servicio y amor a la patria.
Es cuanto, presidenta.
ooOoo