Intervención de la senadora Josefina Vázquez Mota, al participar en la discusión de un dictamen de la Comisión de Justicia, relativo a la renuncia de Arturo Zaldívar Lelo de Larrea como ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Ciudad de México, 15 de noviembre de 2023
Versión de la intervención de la senadora Josefina Vázquez Mota para referirse al dictamen de la Comisión de Justicia, el que contiene punto de acuerdo relativo a la renuncia de Arturo Zaldívar Lelo de Larrea como Ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación
Gracias, presidente.
Con su permiso.
Voy a ser realmente muy breve.
Ya había intentado ampliar su mandato como presidente de la Corte, contraviniendo totalmente el mandato de la Constitución.
La causa grave frente al Ejecutivo no es reciente, la causa grave frente al Ejecutivo ha dejado evidencias claras de tiempo atrás que simple y sencillamente no existían porque aceptó la sumisión como camino y la traición a la Constitución.
Frente al Senado, la causa grave no podría responderla ni justificarla porque no la tiene ni cumple con el mandato del artículo 98 constitucional.
Esto no tiene que ver con sus elecciones políticas y electorales, que está en su derecho como cualquier ciudadana o ciudadano, lo que hoy pretende el ministro Zaldívar tiene que ver con su traición justamente a ese juramento que en su momento hizo de cumplir y hacer cumplir la Constitución.
Si no hubiese hecho este juramento podría haber salido a apoyar cualquier opción electoral en el ejercicio de su libertado, pero lo que aquí estamos abordando y de lo que aquí estamos hablando no es de un ejercicio de la libertad, que queda claro está ahí consignado en la Constitución.
De lo que estamos hablando es que él juró cumplir y hacer cumplir la Constitución y hoy, una vez más, la traiciona.
Sí, saldrá por la puerta de la traición, se va como un traidor a la Constitución, se va como un traidor al Poder Judicial, se va como un traidor al juramento de cumplir y hacer cumplir la Constitución y se va como un traidor a México, porque ocupando una posición de tal relevancia traiciona no solamente sus principios, aquello por lo que juró ser leal, sino también a la patria.
Se puede ir como cualquier ciudadano a donde elija y a donde quiera, pero en este caso en particular se va con el sello de la traición, se va por la puerta de atrás y se va traicionando también su propia historia como un gran jurista que algún día fue y decidió enterrar por una ambición absolutamente personal.
Qué tragedia que, pudiendo haber construido una historia de lealtad a la Constitución, haya decidido destrozarla con la propia historia de su vida y dejando evidencia de sus actos.
Votaremos, como se ha señalado aquí, en contra, no porque quisiéramos que se quede alguien que ha traicionado su juramento y a México, sino porque se tiene que ir por esa puerta que la historia lo juzgará hoy y mañana seguramente con mayor severidad, que es la puerta de atrás, la puerta de los traidores.
Es cuanto, presidente.
ooOoo