Intervención del senador Damián Zepeda Vidales, al participar en la discusión de un dictamen de la Comisión Bicamaral para la evaluación y seguimiento de la Fuerza Armada permanente en tareas de seguridad pública, respecto del primer informe semestral remitido por el titular del Poder Ejecutivo federal.
8 de noviembre de 2023
Versión de la intervención del senador Damián Zepeda Vidales, al participar en la discusión de un dictamen de la Comisión Bicamaral para la evaluación y seguimiento de la Fuerza Armada permanente en tareas de seguridad pública, respecto del primer informe semestral remitido por el titular del Poder Ejecutivo federal
Con su permiso, presidenta.
La inseguridad es el problema más grave que tenemos en este país, no de ahora, sino de hace ya tiempo, al menos tres sexenios hemos vivido los mexicanos con una violencia completamente fuera de control.
Yo no vengo aquí a defender la política de seguridad pública del último sexenio emanado de mi partido, ni la del anterior sexenio, ni la de éste. Las tres han fracasado, esa es la verdad.
Lo que a mí me parece increíble es por qué si tienes un histórico de fracaso, en materia de seguridad pública, el gobierno actual continúa con la misma estrategia que ha resultado un fracaso.
¿Cuál ha sido el gran fracaso de los últimos años en México? La militarización de la seguridad pública.
El presidente Calderón tomó su sexenio con alrededor de ocho mil homicidios al año, ocho mil, y concluyó arriba de 20 mil.
El presidente Peña tomó su sexenio con poco más de 20 mil, y concluyó con una cifra muy superior.
Hoy el Presidente López Obrador, si sumas ya estos cinco años, tienes alrededor de 170 mil asesinatos, homicidios dolosos.
Es increíble que se atreva alguien a pararse y decir que la estrategia está funcionando, cuando cada año ya tienes una cifra superior a los 30 mil asesinatos.
No, no solo no está funcionando, sino que es un fracaso absoluto el que tenemos.
Por eso cuando el Presidente López Obrador toma protesta a muchos de nosotros nos sorprendió que agarra y traicionara abiertamente la promesa que le hizo a los mexicanos.
¿Qué prometió el Presidente López Obrador en una de las pocas cosas en que un servidor estuvo de acuerdo en sus propuestas de campaña? Prometió cambiar la estrategia de seguridad. Y en eso yo estuve de acuerdo, y nosotros estuvimos de acuerdo, y decíamos: Oye, sí tenemos que intentar un camino distinto.
Pero llega, y lo que hace el primer año es intentar la militarización absoluta de la seguridad pública en el país, y propone una reforma constitucional abierta, Guardia Nacional militar, “quiero que las Fuerzas Armadas a través de la Guardia Nacional se encarguen de la seguridad pública”.
Logra aprobarla en la Cámara de Diputados, se olvida con votos de parte de la oposición, y llega a este Senado donde se encuentra con un dique.
Y por primera vez, creo que, de las primeras ocasiones, se conforma el bloque de contención. Y decíamos en la oposición: No, señor Presidente, no vamos a permitir que militarice el país.
Se logra una mesa de acuerdo de alto nivel en donde decimos: A ver, todos queremos que se resuelva el problema de seguridad, ¿qué se requiere para poder cambiar de una vez por todas la política pública de seguridad pública en este país?
Y se logra un consenso que está en la Constitución, y que dice lo siguiente: “Vamos a hacer consolidar un cuerpo civil, profesional, técnico a nivel nacional que se va a llamar Guardia Nacional, que va a ser civil, que va a tener doctrina policiaca, no militar, que se va a encargar de combatir al crimen que le corresponde al Gobierno Federal, que es principalmente el crimen organizado. Y vamos a fortalecer policías estatales y municipales con presupuesto, porque es ahí donde está el delito del día a día”.
Hay 30 millones de delitos en este país, ¡hombre!, están en las colonias, no las van a combatir militares con Hummer, con armas largas, persiguiendo, ¿a quién? ¿Al que se robó algo en una casa-habitación?
¡Por favor!, es absurdo.
Necesitas fortalecer policías municipales y estatales. Y de eso salía en una gran reforma, pero no la acaban de publicar cuando el Presidente ya traicionó lo que dice la Constitución.
Y no existe la guardia civil, esa es la verdad, compañeros, se dijo ahí cuánto tiempo quieren para que se forme este cuerpo civil, y en tanto te vamos a dar el permiso que no tuvo ni el Presidente Peña, ni el Presidente Calderón, un permiso legal para que las Fuerzas Armadas puedan ayudar en seguridad pública siempre y cuando se cumplan los criterios de la Corte Interamericana de los Derechos Humanos, que es extraordinaria, que sea complementaria a la labor de las policías de seguridad pública, pues, que sea subordinada al mando civil, que sea temporal, que sea fiscalizada, que sea regulada, perfecto.
Cinco años se les dieron, los cinco años se lograron en un acuerdo que estaba sentado el gobierno, pero no, empieza y qué agarraron, agarraron y tiraron a la basura esa reforma.
Hoy por hoy, compañeros, perdón que lo diga, pero es la verdad, no existe la guardia civil, de 120 mil elementos que reportan el último informe, aproximadamente alrededor del 90 %, casi el 90% son militares, no existe la guardia civil, existen las Fuerzas Armadas haciendo labores de seguridad pública.
Y, engañosamente dice el gobierno: “Ah, ¿quieres que desaparezca la Guardia Nacional? Entonces quitamos a las Fuerzas Armadas”, No.
Queremos que exista la Guardia Nacional Civil, por única ocasión nunca ha existido, que exista, que se conforme un cuerpo civil, profesional que combata al crimen organizado, no que ande nada más patrullando.
¿Saben que la Guardia Nacional, según su informe es responsable tan sólo de menos del 2 % de las detenciones de este país? Así como mis dedos dicen, 1, 2; 2 %, es increíble, es ridículo, no están deteniendo a los delincuentes, no es cierto, saben que tan sólo son responsables de bloquear alrededor de 80 millones de dólares, solamente en dos años, 80 millones.
Se ríe, se carcajea, el crimen organizado, ¡hombre! Eso lo sacan en una vuelta, por favor, ¡hombre!
Entonces, ¿dónde está el combate? Tenemos que crear ese Cuerpo Nacional Civil que combata frontalmente al crimen organizado, que lo desarticule con inteligencia, inteligencia financiera, que les pegue donde les duele y les quite el dinero y fortalecer policías estatales y municipales, pero no, no sólo las han fortalecido, sino que las han disminuido, pasando el presupuesto de más de 20 mil millones de pesos a 8 mil millones de pesos.
Eso tiene fracaso escrito en todos lados y por eso vemos las cifras iguales, más asesinatos, más delincuencia.
Entonces, por esos motivos, nosotros, cuando llegó la reforma aquí, para prolongar el tiempo en el cual las Fuerzas Armadas podían continuar ayudando en seguridad pública, dijimos: “Pues claro que no, porque es un engaño lo que estás haciendo, no estás si quiera intentando hacer la guardia civil”.
¿Dónde está? Yo pregunto, ¿dónde está? Es los militares.
Entonces, si no se está consolidando un cuerpo civil, por qué te voy a dar otro permiso adicional por más años, cuando se acabe el nuevo plazo van a venir por otro permiso y otro permiso, porque la realidad es lo que ya aceptó el Presidente López Obrador.
No les interesa una guardia civil, quieren una guardia militar, la respuesta es no, porque en el mundo está probado que ha fracasado cuando le encargas la seguridad pública a las Fuerzas Armadas.
¿Eso quiere decir que las Fuerzas Armadas no te pueden ayudar? Por supuesto que no, claro que te pueden ayudar, siempre y cuando sea complementario, siempre y cuando sea subordinado de los civiles, siempre y cuando sea fiscalizado, siempre y cuando sea regulado, dejemos de simular y llamémosles a las cosas como son.
Hoy nosotros votamos en contra de este dictamen porque es evidente que no es cierto que las Fuerzas Armadas estén cumpliendo con los requisitos que les pusimos, no tiene nada de extraordinaria su participación, subordinada.
¿Ustedes creen, ustedes creen que están subordinadas las Fuerzas Armadas al mando civil? Por favor, ¡hombre!
¿Ustedes creen que son complementarias a la Guardia Nacional, cuando la Guardia Nacional no existe? No.
Entonces que este no se escuche fuerte, porque es un no que lo que busca es mandar el mensaje y el llamado de atención a que aquí en el Senado, junto con el gobierno, hagamos por fin de cuentas una verdadera estrategia de seguridad pública que le garantice la paz a los mexicanos y eso pasa por consolidar una Guardia Nacional Civil y fortalecer policías estatales y municipales y no continuar con el fallido camino de la militarización de la seguridad pública.
Muchas gracias.
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