- Los resultados de la mal llamada consulta carecen de toda seriedad, solo buscan validar una decisión previamente tomada y son un mensaje de incertidumbre.
- El PAN promueve que se consulte a la ciudadanía en cuanto a las decisiones importantes para México, pero rechaza enfáticamente el engaño a las personas.
- El nuevo peligro es que López Obrador seguirá usando este tipo de farsas como mecanismo de propaganda y polarización social, en lugar de gobernar.
La mal llamada consulta sobre el nuevo aeropuerto de la Ciudad de México se confirmó día con día, hasta el anuncio de sus supuestos resultados, como una manipulación y un engaño a la ciudadanía. El presidente electo, Andrés Manuel López Obrador y su partido confirman que no les interesa la legitimidad de los ejercicios de democracia participativa, afirmó esta noche el coordinador de los senadores del PAN, Damián Zepeda Vidales.
La simulación que ha sido esa consulta, organizada y pagada por Morena, con sus evidentes inconsistencias y arbitrariedades, son señales preocupantes y revelan el riesgo de la forma en la que López Obrador pretende imponer su voluntad y ejercer el poder, simulando que la sociedad participa en la toma de decisiones importantes para el país, lamentó.
Ciudadanos que pudieron votar hasta cinco veces, tinta “indeleble” que se borró en dos minutos, incertidumbre sobre el paradero de las urnas, conteo de votos en lo oscurito y una larga lista de irregularidades, rayan en el ridículo, restan toda legitimidad a la mal llamada consulta y desacreditan el resultado a favor de una opción que ni siquiera es opción, porque no se ha presentado ningún fundamento técnico de que en Santa Lucía pueda funcionar un aeropuerto en combinación con la actual terminal aérea, afirmó Zepeda.
“Lo dijimos hace tiempo y lo reiteramos hoy cuando simulan la presentación de un resultado que ya estaba predeterminado: es una vacilada, un ejercicio de manipulación política que está llevando a cabo el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, y que no tiene validez alguna, pero que ahora sí puede derivar en generar grave desconfianza para las inversiones en el país”, sostuvo.
Es poco serio e irresponsable lo que se ha hecho con esta consulta, acusó. “Todos hemos visto la burla en la que esto se convirtió, pero el verdadero peligro ahora es que López Obrador pretenda hacer de este tipo de farsas, su manera de tomar decisiones y de gobernar, no para generar buenas políticas públicas, sino para generar un mecanismo permanente de propaganda y polarización social”.
El coordinador de los Senadores del PAN comentó que adicionalmente al abuso y la manipulación que representa el ejercicio llevado a cabo, las consecuencias serán graves para el país también en términos económicos, ya que envía un terrible mensaje de incertidumbre jurídica.
Por lo anterior, puntualizó, seguiremos impulsando en el Congreso iniciativas para regular y dar certeza a los mecanismos de democracia participativa. No nos quedaremos con los brazos cruzados, utilizaremos las facultades que la ley da al Poder Legislativo y no permitiremos que este tipo de ridículos y ocurrencias se vuelvan práctica común para comprometer decisiones trascendentes para México.
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