Versión de la intervención del senador Julen Rementería del Puerto, al participar en la discusión de un dictamen de las comisiones unidas de Puntos Constitucionales y de Estudios Legislativos Segunda, por el que se adiciona una fracción XXIII Bis al artículo 73 de la Constitución
Muy buenas tardes.
Muchas gracias, presidenta.
Yo en realidad vengo porque quiero congratularme por lo que se está logrando en esta materia.
Si entendemos que, en nuestro país, junto con algunas materias adicionales, pero el tema de la delincuencia, el tema de la inseguridad es algo que realmente afecta al libre desarrollo de las personas y que, además, por supuesto, genera inconvenientes al mismo desarrollo de la economía en prácticamente la generalidad del país, entendemos pues que esto del tema de la seguridad es un tema muy relevante.
Y lo que hoy se viene a hacer es tener la posibilidad de que específicamente en esa materia haya una regulación que le dé certeza, que le dé orden, que le dé rumbo precisamente a todas aquellas empresas que se dedican a prestar la seguridad privada, que puedan cumplir con todos los requisitos que la ley marca, porque hay que decirlo, lamentablemente se conoce de casos que no es así y entonces ni siquiera funcionan bien, pero además tienen el desamparo luego a toda su base trabajadora.
Hoy lo que necesitamos hacer es, a partir de esta modificación al artículo 73, poder tener esa facultad de expedir en el Congreso la Ley General para regularlo de manera ordenada, sin excesos, para no entrometernos en la vida de las entidades federativas, pero sí que haya, como se dice a partir de la Ley General, las reglas mínimas, a partir de las cuales se tiene que poder conceder la posibilidad de prestar un servicio de esta naturaleza.
Ayudaremos con esto a tener en algo mejores condiciones para la seguridad, y eso no hay que perderlo de vista.
Lo importante al final aquí es que podamos, y celebro que esto sea por consenso, o parece por lo menos que así va a ser, por consenso, porque de lo que hablamos es de contribuir, aunque sea con un grano de arena, para poder tener la certeza de que aquella empresa o aquella persona que está trabajando para una empresa, que pertenece a una de seguridad privada, tenga perfectamente cubiertos todos los requisitos que deben tener para poder prestar ese servicio.
Y que no salgan por ahí improvisados, porque lo que teníamos, hay que decirlo, de repente los requisitos en un lado eran extremadamente estrictos e injustificados y en otro era totalmente laxo, y lo que hacía es que había la incertidumbre de qué tanto se podía confiar en una empresa de este tipo.
Hoy creo que, con esta legislación que se puede generar a partir de esta reforma al 73 de la Constitución, podamos tener dos cosas: empresas reguladas, bien reguladas, pero sin dejar de lado desde luego las potestades de las entidades federativas. Y con eso ganamos todos.
Así que por supuesto que, igual que el que me antecedió en el uso de la palabra, los conmino a que podamos votar a favor de esta reforma.
Es cuanto, presidenta.
ooOoo