Versión de la intervención en tribuna del senador Julen Rementería del Puerto, al participar en la discusión de un punto de acuerdo que exhorta al Ejecutivo Federal, a la Secretaría de Educación Pública y al Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación a suspender la evaluación docente programada del 3 al 25 de noviembre del presente año, así como todo proceso de evaluación para el ingreso, promoción, reconocimiento y permanencia de las y los maestros
Muchas gracias, Presidente.
Muy buenas tardes.
En primer lugar, quisiera agradecer el tiempo que le dio a este tema tan importante, la Presidencia: más de 10 minutos en una proposición con punto de acuerdo, cuando el reglamento marca cinco. Me parece bien; Ojalá en el futuro así sea para todas las proposiciones. Eso, en primer lugar.
En segundo lugar, para que siente un precedente y lo podamos tener en cuenta: más de 10 minutos.
En segundo lugar, lo importante, frente a lo que estamos: no es el regatear un asunto que tiene el origen en un lugar o en otro, cuando hablamos de una reforma. Lo importante es saber de qué está contenida esa reforma y cuáles son las implicaciones en la sociedad, en los niños de todos, en los hijos de los senadores de Morena, del PRI, del PAN, del Verde, de Movimiento Ciudadano, del PT, de absolutamente todos los partidos de este país. De eso estamos hablando.
Y cuando las posturas sólo se centran en poder señalar o hacer querer señalar, primero, que hubiera un castigo para los maestros, esto es falso, porque de lo que se está hablando es de una evaluación que ha transitado.
Les puedo hablar, por ejemplo, ya en el estado (inaudible) ningún tipo de conflicto los maestros a evaluarse, en donde ya no hay ningún problema, en donde al final entendieron que esto es para el beneficio de los propios maestros y, por supuesto, de la educación en México.
Entonces, en el fondo de lo que estamos hablando es de, al echar atrás esta reforma, buscar simplemente retroceder el reloj a lo que ocurría antes y que nadie niegue aquí que antes de lo que se estaba dotando, precisamente, el servicio docente en nuestro país era de, a través de componendas, tener a maestros en muchas aulas.
Hay muchos dignos representantes del Magisterio, muchos.
Hay muchos maestros, afortunadamente la mayoría, que merecen todo nuestro respeto, pero ha sido una práctica –en el pasado– común, el obtener precisamente esas plazas a partir de lo que se trató de evitar en esta reforma, y que el que pueda ascender sea por un tema de un mérito; que impere en este país y, específicamente en el tema educativo, la meritocracia, que pueda salir adelante el que se vaya preparando, el que se vaya capacitado y el (inaudible) la propia reforma que se perfeccione.
No estamos en contra de que se revise. No estamos en contra de que el documento pueda mejorarse. De lo que estamos en contra es que simplemente, como la ocurrencia que se dijo ayer en la otra Cámara, en donde dijo “que no le quede ni una coma”, eso, señores, pareciera que lo que estamos es solamente escuchando discursos de hace unos cuantos meses, de la campaña.
Ya somos parte del gobierno; algunos más…, algunos más involucrados en ello porque tendrán seguramente más cercanía con las decisiones del Ejecutivo y hay que tomar las cosas en serio. Hay que decirle a la gente lo que realmente le conviene y cómo podemos hacer que las cosas funcionen para mejorar.
No se vale venir simplemente, para quedar bien con un grupo de personas en el país, no importa de qué tamaño, venir a echar atrás una reforma que costó tanto trabajo su implementación.
Por eso es que estamos en contra; en la parte del fondo. Y en la forma, porque se propone, como reza ahí en la pantalla, que se exhorta al Ejecutivo a que haga caso omiso de la aplicación de una ley. Eso ni siquiera es facultad de él, no podría, alegremente, decir: “Ya no se aplica esta norma” y que de repente ya no lo tengamos que hacer. No se puede pedir imposibles y eso que se está pidiendo desde el grupo de ustedes al Presidente de la República, no importa cómo se llame, es simplemente improcedente.
Es cuanto, Presidente.
ooOoo